Días pasados falleció en nuestra ciudad Carlos Alberto
Vitral, más conocido como ‘Tuta’ por todos los ayacuchenses.
Pintor de oficio, mamó de su padre los secretos de una
profesión en la que desplegó toda su sabiduría. ‘Tuta’ fue uno de los grandes pintores
del Ayacucho de las últimas décadas.
Conocedor al dedillo del oficio, venía de
la vieja escuela en la que los colores se preparaban con polvo, aceite y aguarrás, totalmente diferente al trabajo de un pintor por estos días.
De chico también conoció otra pasión: el fútbol. Unió su
vida al Club Defensores de Ayacucho, entidad a la que se entregó por completo
en todos los órdenes: jugador, colaborador, técnico y dirigente.
Por sus manos pasaron cientos de pibes defensoristas a los
que les brindó lo mejor de sí como formador y quienes aún recuerdan su consejo, la palabra
justa y la indicación necesaria sobre como pararse en una cancha.
Como jugador se lo recuerda como recostado siempre sobre la
derecha, el famoso ‘peón de brega’ del fútbol de antes, un ‘volante por
derecha’ del fútbol actual.
Por algún motivo, el destino lo deposita a fines de la
década del 50’ en el Ateneo Cultural y Deportivo “José Manuel Estrada” en donde
integró aquel inolvidable equipo 'papal' de 1959 que formaba con Néstor ‘Cacho’ Pessolano
al arco; ‘Calín’ Traiani y Edgar Tirri; Rafael Peralta, Néstor ‘Coco’ Milloc y
Atilio Frayarena; Oscar ‘Coco’ González, ‘Tuta’ Vitral, Luis Pérez, ‘Chiquito’
Pereyra y Alberto ‘Negro’ Cáceres.
Repatriado tiempo después a Defensores, forma parte de sus
equipos de Primera División, como el de 1963 por citar alguno, que formaba con Juan
Scottu; Raúl Póo, Irazábal y Ciganda; E. González y Roberto Póo; Ramón, Asís, ‘Tuta’
Vitral, Gourriet y Munín.
Retirado casi a fines de la década del 60’, comienza su
carrera como técnico de Primera en donde en 1970 ya era el responsable máximo
del plantel de la entidad de calle A. del Valle.
Es de destacar que la década del 70’ tuvo en ‘Tuta’, Aníbal
Alonso y Juan Amodeo a los técnicos que tuvo Defensores a lo largo de esos diez
años. Tres defensoristas ‘a muerte’ que estaban siempre cuando la entidad tricolor los
precisaba, y entre ellos alternaron, por entonces, en la dirección técnica del primer equipo.
Es, precisamente, en esa década cuando Defensores le brinda una de
las alegrías más grandes que le dio el fútbol: el Torneo Oficial de 1978.
Defensores era nuevamente campeón después de una sequía de 18 años y ‘Tuta’,
junto al ‘Pampeano’ Duprat, eran los colaboradores del técnico responsable de
ese logro: Juan Amodeo.
Esas cosas que tiene el destino hizo que ‘Tuta’ se retirara
de Defensores y los 80’ lo encuentran en el Club Atlético Independiente quien
lo convoca para entrenar a su primer equipo. Dirigió al equipo de Ruta 50 entre
1988 y 1993, año en que lo dirige Juan Carlos Moyano, para retornar ‘Tuta’
nuevamente en 1994.
Más allá del lugar físico en que se encontrara, ‘Tuta’ era
Defensores y Defensores era ‘Tuta’.
Un lazo de tres colores trenzado en mil tardes de fútbol.
‘Tuta’ era un personaje querido y querible de este pueblo.
Con la sabiduría que dan los años y la bohemia a cuestas, era imposible no ver
esa bicicleta que lo transportaba detenida junto a la vereda de la Farmacia Orfila,
‘arreglando el país’ en la charla junto a los amigos de siempre.
El pueblo tricolor está de duelo, nuestras calles extrañarán
el transitar de ‘Tuta’ montado en su bicicleta, así como lo extrañarán las
cercanías del banco de suplentes de nuestro Estadio Municipal.
La línea de cal ya no lo verá junto a ella, precisamente ese
elemento con el cual se relacionó toda una vida. Tanto en el fútbol, como en su profesión
como pintor.
Mi humilde recuerdo a este futbolero de ley, y un saludo
respetuoso a sus familiares y amigos.
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